"El Zorzal Criollo en Minneapolis" es una escultura en forma de cama y lowrider, realizada por la artista Alexa Horochoski, expuesta en "The Soap Factory Gallery".
Está fabricada en hierro y pintada con pintura de auto y pinstriping (filete), equipada con sistema de estéreo y suspensión hidráulica que se opera utilizando una caja de controles.
Lejos de todo lo que uno pueda entender dentro del concepto de escultura, prefiero copiar a Florencia Braga Menéndez, recientemente nombrada el 21 de enero del corriente como Directora General de Museos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, quien así se expresa en el sitio: http://www.galeriabm.com/spanish/novedades/Lowrider180706.asp
Los lowriders auténticos, decorados con pinturas de mujeres desnudas, hiper-sexualizadas o con imágenes de la Virgen de Guadalupe, ilustran la cultura machista Chicana. La hidráulica permite que el auto suba y baje, imitando el movimiento del falo. Pero sin ruedas "El Zorzal Criollo" es distintivamente un mueble o cama. Robado de su estado de auto, este lowrider sólo puede existir dentro de la galería o del hogar. Dentro de la galería su función es esa de una escultura minimalista, un tanto ruidosa y pintoresca. Dentro del ámbito del dormitorio su función es el sexo. Es importante notar el hecho de que esta cama-lowrider ha sido transplantada del garaje o la calle a un territorio femenino, el hogar. Apropiando el estereotipo del hombre trabajando en su taller, el artista transfiere esta actividad al dormitorio.
Todos los lowriders reflejan las personalidades y cultura de sus dueños. "El Zorzal Criollo", apodo de Carlos Gardel, esta escrito en el lado posterior de la escultura y recuerda este cantor de tango Argentino que puso a la Argentina en el mapa mundial en la década de 1930, y cuyo exilio en Paris marca la política tumultuosa de su época. En este caso la cama-lowrider funciona como ataúd o mausoleo que contiene el espíritu de Gardel.
Un híbrido cultural que explora a los puntos de encuentro entre hombres y mujeres, Chicanos y Argentinos, entre arte popular y arte conceptual, "El Zorzal Criollo" esta diseñado tanto para el gusto del entusiasta de autos como el del aficionado del arte.
Esta escultura fue realizada con la ayuda de varios técnicos, Rollin Marquette (de Marquette Fabrication) construyó la estructura de hierro. El grupo de trabajadores en Chopshop Creations hizo el trabajo de chapa, la pintura y la hidráulica. Scott Berosik, de Pro Art Design, hizo el pinstriping (fileteo) a mano. Rick Díaz, de Díaz Auto and Body Shop, pintó con soplete el título de la cama-lowrider. Carlos Gutiérrez, de Calcamoías Azteca, imprimió las plantillas. Stephen Rife trabajo en el video y el sistema de estéreo.
Como no sabía que era un lowrider, consulté en http://es.wikipedia.org y paso seguidamente a compilar la información obtenida.
El Low Rider es una forma de manifestación de la cultura estadounidense, para ser más preciso de la cultura México-americana, en la cual se modifican coches clásicos, como una forma de vivir y manifestarse ante la sociedad.
El primer sistema Low Rider data del año 1979 cuando un inquieto joven chicano lo ideó, debido a su escasez monetaria y el gusto de tener un coche modificado. Para ello usó un tipo de peso, como sacos de arena, para ponerlos dentro del habitáculo del coche y así "achaparrarlo" por el peso, para diferenciarse de los demás. Posteriormente se descubriría el sistema de Pompeo o sistema hidráulico (Pumpers en inglés) y mediante el uso de energía eléctrica aplicada a las válvulas, lo aplicó al coche clásico, dando como resultado el conocido Low Rider actual.
Los primeros lowriders solían ser coches clásicos de los años 40 y 50, pero debido a que es difícil conseguirlos, se usan coches generalmente de los años 70 y 80. El más usado es el Chevrolet Impala, aunque también se utilizan otros de la marca Oldsmobile.
Básicamente es un sistema hidráulico de dos piezas, una un amortiguador hidráulico y la segunda un resorte grande, que en conjunto es llamado Pompa.
Mediante una palanca, se le aplica un flujo de corriente eléctrica al sistema que comprime el amortiguador y a su vez el resorte, agregándole energía potencial a éste, mientras que con otra palanca se descomprimen los amortiguadores y por ende los resortes, que liberan su energía haciendo que el coche de botes en contacto con el suelo.
El sistema funciona sobre bombas hidráulicas, similar al sistema hidroneumático del legendario Citroën DS. En el maletero (baúl) trabajan varios motores eléctricos y bombas que producen la presión de aceite. Con esta presión se activan los cilindros hidráulicos que sustituyen junto con los muelles reforzados la suspensión original. Los cilindros son manejados con palancas y relés, que provocan el baile. Las bombas necesitan una gran cantidad de energía, que viene de numerosas baterías, se puede montar en el maletero. Cuanta más energía, más alto y rápido son los movimientos.
Personalmente observé un lowrider en la Avenida peatonal 3 en Villa Gesell. Allí entre bailarines de tango, números musicales, animadores y estatuas vivientes que entretienen al veraneante con su trabajo a la gorra, apareció un payaso con ese tipo de automóvil. Sin bajarse del mismo, exhibió sus habilidades, colocando el coche en diversas posiciones, ya sea levantándolo de atrás o de adelante, colocándolo de costado en dos ruedas o poniéndolo de panza contra el piso mientras las ruedas se desplazaban hacia afuera, conformando un espectáculo muy entretenido y novedoso.
En cuanto a la autora de la escultura, Alexa Horochoski, nació el 11 de octubre de 1965 en algún lugar de la Patagonia, en Argentina, emigrando en 1975 y residiendo actualmente en el 477 Banfil Street, Saint Paul, capital del estado de Minnesota.
Terminó sus estudios de periodismo y literatura creativa en la Universidad de Missouri, Columbia en 1988 y se recibió con una maestría en fotografía y grabado de la Universidad de Michigan en 1996.
Comenzó sus exposiciones en 1999 y su práctica artística se ha expandido abarcando escultura, pintura y video. Es profesora asociada en St. Cloud State University en Minnesota y miembro del Concejo de Curadores del Minneapolis Institute of Arts.
Es representada por la galería Monique Meloche Gallery de Chicago y Braga Menéndez Arte Contemporáneo en Buenos Aires, donde encontramos sintetizado su pensamiento de la siguiente manera:
A través de mi trabajo exploro la dicotomía de mi bicultura. Me atraen los paisajes de tabernas y peluquerías latinas porque los estériles shoppings y las oficinas modernas me recuerdan mi mortalidad. No creo en la jerarquía del proceso artístico. Veo cada exhibición como una puesta en escena entretenida y simultáneamente bella, más bella que real.
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