La
calle Lanín se extiende entre la
calle Brandsen y la Avenida Suárez, entre las vías del Ferrocarril General Roca y la calle Aarón Salmón Feijoó, en el barrio de
Barracas.
En
el Nº 33 vive y tiene su taller el reconocido artista plástico Marino Santa
María, quien decidió en el año 1999 embellecer su vivienda con pinturas y
mosaicos.
Los
vecinos le pidieron que pintara también sus casas, para lo cual fue necesario
realizar una obra de envergadura, restaurando primero las antiguas casas y luego el
artista y sus colaboradores engalanaron la calle Lanín, contando afortunadamente
con el apoyo de la "Fundación del Banco Ciudad de Buenos Aires", la "Secretaría de Cultura de la Ciudad", la "Organización de Estados Iberoamricanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura", la "UNESCO", la "Corporación Buenos Aires Sur" y empresas de pinturas, cerámicas y mosaicos
El
proyecto fue inaugurado el 19 de abril de 2001, siendo
intervenidas 40 fachadas a lo largo de las tres cuadras de la Calle Lanín.
En
2008, se complementó con la instalación “Huellas del Aire” a lo largo del
paredón del ferrocarril, un conjunto de pesados marcos dorados con fotografías
de trozos de cielo y otros con espejos, recreando una suerte de mágica
sensación de ilusión y realidad.
Carlos
Gardel está presente en el interior de la casa taller del artista Marino Santa
María, en la calle Lanín 33, tal cual puede verse en un gran mural que encabeza
la presente entrada de este blog.
Lo
apreciamos nuevamente junto al autor y otro Gardel de menor tamaño.
Apoyado
en una silla, se encuentra otro mural.
Y
otros tres más, todos de la serie “Gardel hay uno sólo”, y exhibidos en la
“Noche de los Museos” en noviembre de 2012.
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