Desde 1995 se celebra anualmente en el mes de octubre en la República Oriental del Uruguay, el Día del Patrimonio”, organizado por la “Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación”, dependiente del “Ministerio de Educación y Cultura.
Originalmente quedaba abierto al público gratuitamente, los edificios gubernamentales, museos, instituciones educativas, iglesias, edificios y hasta casas particulares, que tuvieran interés histórico o arquitectónico, ampliándose posteriormente a todo aquello material e inmaterial que se valora en el imaginario colectivo, por lo cual comprende como ejemplo a ritmos uruguayos como la murga.
Durante la celebración correspondiente al año 2004, fueron colocadas dos obras escultóricas en la calle Carlos Gardel, en el barrio Sur de Montevideo, arteria donde también se levanta el monumento al querido cantor en la “Plaza Medellín”.
La figura de Gardel con su nombre se destaca en una obra realizada pacientemente mediante la utilización de pequeños fragmentos de mosaicos o azulejos.
La misma técnica fue aplicada para realizar la guitarra, donada por la “Asociación General de Autores de Uruguay” (“AGADU”).
Como puede verse en la imagen siguiente, junto a las dos ofrendas azulejadas, no había ninguna placa.
Posteriormente se colocaron las dos primeras placas, la superior cuyo texto no alcanzo a leer, y la donada por la “Asociación Uruguaya de Empresas Aseguradoras” (“AUDEA”), agrupación sin fines de lucro que reúne a las compañías privadas que operan en materia de seguros.
La placa siguiente fue colocada por la empresa “Pinturas Inca”, que colaboró con la Intendencia Municipal de Montevideo, con el material para mejoramiento de las fachadas en las calles Reus, Curuguay, Pérez Castellano, y Carlos Gardel, pintando en el año 2002 unas 90 casas en las seis cuadras entre las calles Yi y Río Branco.
Por último se agregó la placa indicativa de la calle Carlos Gardel.
Junto a la placa inferior, la más pequeña, cuyo texto tampoco alcanzo a leer.
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